Es la 1:30 de la madrugada y acabo de llegar a casa: tenía una cena con amigos. Odio los viernes de LEB Oro.

No pensaba escribir nada, pues creo que en los partidos que no puedo ver en directo no tengo la suficiente información como para daros una crónica/texto/opinión sincera y de una calidad aceptable.

Hoy me salto todas mis normas.

Lo seguí con el móvil lo más educadamente posible que permite una cena social. Hasta los últimos dos minutos, donde los buenos modales pasaron a mejor vida y todo el restaurante se enteró, en un alarde de decibelios por mi parte, del resultado final del ya histórico Gipuzkoa-Estu de ayer.

Es la 1:35 de la madrugada y no puedo dormir. Solo me vienen a la cabeza dos canastas, un grito de euforia y una sonrisa permanente de oreja a oreja.

—-

Pues claro hijo, cómo narices te vas a dormir con LA GESTA DE ILLUMBE. En mayúsculas, sí. Qué bote pegué en el restaurante con el triple de Dee. Qué salto di con la canasta de Wintering. Casi me detienen por altercado público. De la euforia me sentó mal la cena.

Qué más da.

Tú seguro que pasaste también una noche magnífica. Seguro que gritaste esa canasta final como hace mucho tiempo no lo hacías. Quizá hasta rompiste algo de la emoción. Seguro que algún familiar/amigo/vecino, alertado, te preguntó si estabas bien. «¿Bien?, ¿BIEN?. Estoy mejor que nunca».

Seguro que sientes que este año sí. Seguro que te estas volviendo a enganchar a este equipo, si es que en algún momento ondeaste la bandera blanca. Seguro que te lo estás creyendo. Sabes que nos toca ya.

Y tienes razón. Y aquí puedes expresarlo.

https://twitter.com/EstuPlaza/status/1745934782582636587

—-

Sobra decir que es el final más demencial del Estu en la LEB Oro. Y, qué diantres, de todos los que yo recuerdo. Tú, que perdíamos de 7 a falta de 30 segundos. Esto qué es. Que antes nos habían tangado tiempo (+7 segundos a Gipuzkoa) en la mesa de anotación por un error en el reloj de posesión. De verdad. Que le habían cascado una técnica a Rivero por ello, que fue un punto más para Gipuzkoa. En serio. Que estuvieron apunto los del silbato de comerse unos 7 pasos de Aurrecoechea (suerte que pitó la árbitra más alejada de la jugada, ante la inacción de sus colegas).

De verdad y en serio.

Y lo que te rondaré morena. Los triples de Toms Hielo en la Sangre Leimanis, o de Alex Omnipresente Murphy. O el que metió Jonny Stephen Dee Thompson para empatar a 83. Y por supuesto, la última de Alec Buzzer Beater Wintering coronado con la melé de todos sus compañeros.

En este vídeo con el triplazo anterior de Johnny Dee. Vaya burrada.pic.twitter.com/aKaqviKqgh

— Carlos Sánchez Blas (@blasradio) January 12, 2024

—-

Realmente no quiero hablar del partido. Mírenlo si no lo han hecho.

Miren como el Estu se ha adaptado a jugar sin Carrera y sin Francis. Miren el paso adelante de todo el grupo. Ayer fue Murphy el líder. El bueno, buenísimo, de Murphy. 19 puntos, 26 de valoración. Y siempre está.

Miren el último fichaje, Guillem Ferrando, y sus 4 triples cuando más sufría el equipo. Cómo se echa el equipo a la espalda. Cómo, gracias a él, a la postre el equipo suma el triunfo. Ahora se ficha con cabeza, con sentido común, al son de Rivero, un entrenador absolutamente de diez.

Miren a Nzosa y su excelente progresión. Da rabia que sea cedido, porque con confianza y minutos, hay pívot para aburrir.

Miren en qué pabellón se ganó, cómo y ante qué equipo. Piensen en la importancia de lo de ayer. En el segundo golpe sobre la mesa del Estudiantes a esta competición, tan bonita por sus equipos, sus aficiones y su igualdad y tan despectiva por quién la dirige. La FEB va a hacer todo lo posible para que el Estu se quede un año más en LEB Oro. No tengo pruebas, pero tampoco dudas. Y cualquiera que esté en el día a día del equipo lo sabe.  Perdonen la afirmación en modo hincha, pero conviene recordarlo, pues hasta ayer mismo casi nos la lían con la mesa.

Comparen este tipo de partidos con respecto a otras temporadas. Era una derrota clarísima. Una decepción más. Un quiero y no puedo. Un no dar la talla en momentos decisivos, donde se ganan las ligas. No hemos perdido un partido fuera de casa en toda la primera vuelta. Te lo dicen hace un año y no das un duro.

El Estu ganó ayer como lo hacen los grandes. Contra todos, a la épica. Y ya nos tocaba, después de tanta mierda tragada. Ya tocaban fotos como la que encabeza este artículo.

Bueno, la ponemos otra vez.

—-

---

—-

Ahora te bajas los humos. Que es 14 de enero. Que queda toda la segunda vuelta y solo sacas una victoria al segundo, Coruña.

Te bajas dos tonos y sigues trabajando. Sigues en dinámica, sigues mejorando muchas cosas que se necesitan. Sigues buscando cómo dominar todo el partido, cómo evitar sustos, cómo tener una regularidad los 40 minutos. Cómo encajar las piezas -ahora que todo funciona- con el regreso de los lesionados. Cómo salir concentrado en partidos que en principio son fáciles. Cómo evitar perder a toda costa. La liga y los de atrás no perdonan.

Sigues partido a partido, paso a paso. No sirve de nada ganar en Burgos y en Gipuzkoa si palmas en casa contra Betis (próximo domingo, 12:30). Así de exigente es esta LEB Oro.

Y aunque el Estu va a estar a la altura, hasta que no retornemos de una vez, aquí las celebraciones duran un día (hoy). Desde mañana, Betis, Betis y solo Betis.

 

Ah, y para la Copa de la Princesa, con el EBA si puede ser, ¿o no?

 

Fotos: Gipuzkoa Basket y Óscar Araujo