El bis del Titanic (0-2)

Publicado por Victor Plaza en

Movistar Estudiantes está herido de muerte. La derrota de ayer contra Burgos es sinónimo de meterse en el atáud y cerrar con tres clavos. O de ver hundirse el Titanic y quedarse quieto en la bodega, mientras la orquesta toca. Y cierto es que hay un mínimo resquicio de esperanza, pero basar el relato en eso sería de sinvergüenza.

Porque ayer el Estu, a diferencia del primer partido, no compitió. No quiso defender y perdió en todos los frentes habidos y por haber. En lo mental, en lo físico, en lo táctico, en lo anímico. En todo. De paliza. Sin paliativos.

Vaya por delante que Burgos es un equipazo, quizá el principal candidato al ascenso. Por músculo financiero, que otorga una plantilla amplia, con recursos, polivalente y muy bien entrenada. Que tiene carácter y que sabe competir en momentos decisivos. Que se crece ante la adversidad, que no falla los tiros definitivos. Que protesta, que gana.

Para el Estu vale lo del primer párrafo, siempre que introduzcamos un «no» al inicio de cada frase. Porque es la noche y el día con respecto a su rival en estos Playoffs. Ayer se confirmo: lo del viernes fue un espejismo, uno grande pues también incluye las dos prórrogas del partido liguero.

Nadie al volante

Hubieron tres pifias clarificantes ayer domingo. La primera, la de Aston Martin y el lío con los neumáticos intermedios. Pero bueno, tienen al mejor piloto de su deporte y dio igual porque mantuvieron la posición. La segunda, la de la izquierda en toda España. Pero bueno, aún conservan el Gobierno central y tienen la posibilidad de redimirse en las elecciones generales. Y la tercera, la de Alberto Lorenzo y su staff, que decidieron jugar el segundo partido ante Burgos con exactamente el mismo plan que el primero. Pero bueno, qué más da, si nos hemos acostumbrado a esta mediocridad, a este despropósito. La pifia del Estu no es remediable: no hay nadie al volante.

Desde hace tiempo eh, tampoco hay que echarle el muerto a Lorenzo. El de ayer, quizás. El endémico no.

El caso es que volvimos a plantear una zona pese al 48% en triples de Burgos en el primer asalto. Bueno, pues ayer el rival anotó 20/31. Un 65%. Yo, en 20 años que llevo viendo y jugando a esto, no he visto cosa igual en una serie. Osea, piensen: dos partidos donde el rival te anota 35 de 62 triples intentandos. Y en tu casa. Y no cambias ni haces nada por remediarlo. De verdad: es dantesco.

Todo sin quitar un ápice de mérito a Burgos que, como se ha dicho, hay que meterlos. Porque el Estu también los tuvo liberados y, aunque anotó, erró los determinantes. Cosa hasta normal dentro de la tensión de un Playoffs.

Para cosas anormales, otras. Como tener a Curry y quitarle cuando más enchufado está. ¿Se imaginan?. Ayer pasó: andaba Franch con un impecable 4/4, tirando del carro (el único), y le sentaron. Ocurrió en la primera parte y también en la segunda, en un momento similar. Es algo inentendible, preocupante y cabreante hasta la extenuación. Es algo tan básico que no es admisible en categoría profesional. Es un error de entrenador de bulto, de esos para recordar y no repetir jamás. Lorenzo, en la segunda ocasión, rectificó al minuto, pero el mensaje nefasto a la plantilla estaba dado: los cambios, automáticos, daba igual qué hicieras y qué no en la pista.

No se vayan que aún hay más

Ni que decir tiene que el descalabro de ayer alcanza a otros actores además del staff. Jawara, por ejemplo, lleva dos partidos que tela marinera. Y se supone que es uno de los fijos, de los que saben jugar a estas alturas de temporada. El interior es un buen termómetro del equipo. Ayer, -19 con él en pista.

La defensa, venga. Este equipo se creó para correr y defender. Lo primero se sigue haciendo, aunque en modo caótico, y lo segundo desapareció hace semanas. Con Javi Rodríguez, sin ser una barbaridad, algo se defendía. Pero Burgos nos ha pintado la cara, y ha visibilizado todas las carencias que se presumían de la plantilla. No damos para más. Es la cruda realidad.

Ayer hubo momentos de auténtica desesperación. Por mantener esa zona inútil, y por permitir tiros abiertos. Uno tras otro. En un Playoffs. Con 0-1 en contra. Toda la intensidad y la fortaleza mental para dominar el primer partido, al traste ayer. Y con ella, la eliminatoria. También por cambiar en todos los bloqueos, sin aguantar, cómo fiando todo a una suerte de emparejamientos donde la ventaja del par visitante era constante. Pero nadie movió nada. Nadie cambió nada. Nosotros, con nuestro plan kamikaze hasta el final.

Solo Franch -cuando le permitieron estar en pista- salvó la cara ayer. Larsen lo intentó pero se le vio ciertamente cansado. El base salvó los muebles por intensidad y acierto. Por saber estar y qué hacer con el balón. Lástima que tampoco sea un jugador con grandes dotes defensivas. Pero claro, aquí tienes un Sola o un Rubén. El jugador completo no existe en este equipo.

Hasta el Wizink no fue el de las grandes ocasiones. O esa fue mi sensación. Que quiza está sugestionada por tanto hartazgo. Pero no ví la olla a presión que debió ser, Demencia aparte. Fuimos cuatro contados los que pedimos la dimisión de la directiva. Por Dios, que es clamoroso. Que estamos en junio y nadie se ha puesto a trabajar para el año que viene. Por la cuenta que nos trae, la planificación debería haberse hecho en LEB si imperara el mínimo realismo. Aún estando en Playoffs. Aún pasando a la F4.

Espero que, de caer en Burgos, las palabras sean gordas. Que se hable de fracaso. Que nadie se olvide del Estudiantes, y del objetivo único año a año: el ascenso. Porque ya me veo el panorama: F4 es un éxito, al año siguiente Playoffs está bien. Y luego lucharemos por mantenernos en mitad de tabla, sin sufrir por el descenso, como hace no tantos años en ACB.

Ya lo siento.

Los milagros para Navidad

Necesita una heroicidad el Estudiantes para sacar esto y devolver la serie a Madrid. Una proeza que ni está ni se le espera. Además, tiene toda la pinta de que Burgos no bajará la intensidad el viernes. Querrá finiquitar esto con 0-3, además tiene plantilla para ello. A favor del Estu, que no hay absolutamente nada que perder, pues ya está todo perdido. Hay que ir allí sin tensión y a echar el Euromillones. Hay que ir más dementes que nunca. Ahora sí, hay que hacer quintetos extraños, hay que volverse locos, hay que echar el resto. De perdidos al río.

Odio infinitamente estos mensajes de «aprendemos de nuestros errores», «sabemos dónde tenemos que mejorar», «buscaremos soluciones lo más rápidamente posible». No, por Dios. «Estamos en la mierda y necesitamos un auténtico milagro para salir de ella. Pero no tenemos nada que perder». Algo así, un poco de sangre en las venas. Ya que en la banda no protestamos, rajemos.

 

Que el barco se hunde y la orquesta del Titanic lleva años tocando el bis.

El viernes, Milagro o Muerte en Burgos (20:00)

Fotos: J.Pelegrín

 


6 comentarios

Capitán Ahab · 29/05/2023 a las 13:58

Iba a poner algo, pero es que ya no tengo ni fuerzas…

    Ava25 · 29/05/2023 a las 16:23

    Llamadme loco pero yo creo que remontamos en Burgos.
    La vida es una caja de sorpresas

      Marieta · 29/05/2023 a las 16:52

      Anoche hicimos el ridículo. No se puede jugar tan mal. Muy muy triste. Sin palabras. Sin equipo y sin jugadores.

      Pedro Luis Pozo · 29/05/2023 a las 22:21

      Jajajajajaj, me parto, es lo que se merece una directiva que ha llevado al Estu al caos, sin confiar en su verdadera cantera, os lo merecéis ineptos

Marcos Sánchez Ciruelos · 29/05/2023 a las 19:10

Yo creo que si somos el primer equipo de Madrid esto lo remontamos como los de la sección y nos llevamos al final el gato al agua en la fuente de los delfines celebrando el ascenso a ACB

Isra · 29/05/2023 a las 19:42

Cuando fracasan 18 entrenadores en 18 años (7 en 4 años), el problema está en otro sitio

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